Ascensión, ciclo A

¿Cómo traerá a alguien de regreso a la Iglesia hoy?

Visite Cristo en Nuestro Barrio para reflexiones bíblicas gratuitas para grupos pequeños. Luego, invite a un amigo, familiar o vecino a unirse a usted y compartir juntos la Palabra de Dios.

Oración

Alégranos con santas alegrías, Dios todopoderoso, y haznos regocijar con devotas acciones de gracias, porque la Ascensión de Cristo, tu Hijo, es nuestra exaltación, y donde la cabeza ha ido antes en gloria, el cuerpo está llamado a seguir en la esperanza. Amén

Comentario

Primera lectura: Hechos 1: 1-11

La vista del Señor Jesús ascendiendo en la nube sólo pudo haber sido descrito como impresionante para contemplar. Si nosotros habíamos estado allí, supongo que también hubiéramos permanecido en admiración silenciosa. Los discípulos pueden haber quedado atónitos mirando fijamente al cielo durante horas si los dos ángeles no habían interrumpido este momento. Ellos dijeron, “Galileos, ¿qué hacen allí parados, mirando al cielo?” Hay una misión para comenzar y la urgencia de comenzarla inmediatamente.

Puede parecer extraño que la Misa termine tan abruptamente. La celebración Eucarística es impresionante de contemplar para aquellos que creen que el pan consagrado y el vino son el Cuerpo y la Sangre de Jesús. Después de recibirlo, quizás queramos permanecer juntos para contemplar esta maravilla. Pero, casi tan pronto como recibimos la Eucaristía, somos despedidos de la Misa y enviados al mundo en una misión. La despida que mejor demuestra esto es “Ve y anuncia el Evangelio del Señor.”

Preguntas

    • ¿Has sentido la maravilla de la Eucaristía? Comparta cómo se sintió.

2ª lectura: Efesios 1: 17-23

San Pablo escribe a la Iglesia en Efesios; Que el Espíritu de nuestro Señor Jesucristo, ilumina los ojos de nuestro corazón, para que veamos cuán grande es la esperanza a que estamos llamados.

San Pablo explica que la Gran Esperanza a la que estamos llamados es el que se sienta a la derecha del Padre. El que está por encima de todo principado, autoridad, poder y dominio, y cada nombre que se nombra. El Padre ha puesto todas las cosas debajo de sus pies. Cristo se sienta como la cabeza de la Iglesia, que es su cuerpo.

Los que creen conocen la Gran Esperanza que nos espera. Él es el que nos creó, el que nos ama y nos alimenta, el que nos perdona y nos cura, y el que nos prepara un lugar en la casa de Su Padre. No hay mayor amor que este o mayor causa de nuestro gozo.

Preguntas

    • ¿Qué significa para ti que tenemos tal Gran Esperanza?
    • ¿Cómo fueron iluminados los ojos de tu corazón para ver la Gran Esperanza a la que somos llamados?

Evangelio: Mateo 28: 16-20

Cuando los once discípulos lo vieron, lo adoraban, pero dudaban. Podemos preguntarnos por qué dudarían después de todo lo que habían visto y oído en la presencia de Jesús. Y sin embargo, a pesar de cualquier duda que pueden haber tenido, Jesús le encargó a este pequeño grupo que, “Vayan, pues, y enseñen a todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándolas a cumplir todo cuanto yo les he mandado.”

Así como en el momento de la creación, Dios otra vez envía su Palabra que rápidamente ejecuta su mando. La Palabra se propaga de un pequeño grupo de discípulos a todo el mundo. “La voz de ellos ha salido a los límites de la tierra, sus palabras a los extremos del mundo.

Si el canon de la biblia hubiera continuado creciendo, contendría todas las historias de la Iglesia incluyendo a todos los papas y santos de la época de esta gran comisión hasta hoy. Contendría el nombre de cada una de las personas bautizadas en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Santo Espíritu.

¿Cómo pudo surgir una Iglesia tan grande de un pequeño grupo que dudaban? Porque, como Él prometió, Jesús está con nosotros, y estará con nosotros, siempre, hasta el fin de los siglos.

Pregunta

    • Recordando la riqueza de la historia de la Iglesia, ¿Qué significa para ti que Jesús estará con nosotros, siempre, hasta el fin de los siglos?
La Tarea de Esta Semana

Toma tiempo para leer sobre la historia de la Iglesia o sobre la vida de un Santo.

Oracion

El líder invita al grupo a orar juntos las siguiente Palabras:

Dios nuestro Padre, los cielos proclaman tu gloria. Día a día toma la historia, y noche a noche hace saber el mensaje. Tu palabra Se extiende por toda la tierra, hasta los límites máximos del mundo.

Te alabamos y Te damos gracias por el regalo de tu Hijo que promete estar con nosotros siempre hasta el fin de los siglos. En tu gran amor y misericordia, guíanos siempre y protege nuestros caminos.

Manténganos libre del pecado y del error. Haznos mensajeros de la Gran Esperanza a la que somos llamados. Amén.

El líder guiará al grupo en la oración Salmo 47 (de la fiesta de la Ascensión de El Señor).

Salmo

Respuesta: Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.

Aplaudan, pueblos todos,
aclamen al Señor, de gozos llenos;
que el Señor, el altísimo, es terrible
y de toda la tierra, rey supremo.

R. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.

Entre voces de júbilo y trompetas,
Dios, el Señor, asciende hasta su trono.
Cantemos en honor de nuestro Dios,
al rey honremos y cantemos todos.

R. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.

Porque Dios es el rey del universo,
cantemos el mejor de nuestros cantos.
Reina Dios sobre todas las naciones
desde su trono santo.

R. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.

 
Concluir con un PADRE NUESTRO.

Utilizar con autorización. Todos los derechos reservados. Cristo en Nuestro Barrio es un programa de Escritura diseñado por el Obispo John Dolan de la Diócesis de Phoenix.