Al obispo Olmsted anuncia hoy en la Diócesis de Phoenix, Todo Tuyo María, una Novena de Rosarios de 54 días, comenzando el 30 de agosto – Memorial de Sta. Jeanne Jugan, fundadora de las Pequeñas Hermanas de los Pobres, y terminará el 22 de Octubre – Fiesta de San Juan Pablo II.**
Como rezar la Novena: Como familia, o individualmente, simplemente rece estas intenciones cada día antes de iniciar el Rosario. El Rosario se reza todos los días de la Novena.
La intención que pido a cada familia y a cada Católico es que rece por lo siguiente:
- Por la conversión y protección espiritual de nuestra nación, que actualmente está experimentando desgracias por el pecado, la división, y la malicia.
- Por un auténtico liderazgo, secular y en la Iglesia, que sea enraizado en virtud.
- Por los partidos políticos de nuestra nación, para que sean guiados por el bien común, y para que lleguen a un acuerdo en las cosas fundamentales de cualquier nación con futuro: protección de la vida humana en todos los estados, reconocimiento de la dignidad de cada persona humana precisamente porque él o ella están hechos a imagen de Dios, para que defiendan el matrimonio como una pieza fundamental en la construcción de la sociedad, y la protección de libertad de expresión, libertad de religión, y todas las otras formas de libertad las cuales ayudan a construir un una ciudadanía virtuosa y generosa.
- Por el rechazo de cualquier forma de colectivismo (CIC 1885), ya sea Marxismo o nacido de una falsa ideología, y por el cultivo del verdadero patriotismo, basado en el amor de lo que es mejor en nuestro país, por la solidaridad con todos en necesidad y la subsidiariedad para los pequeños núcleos de gobierno, como lo es la familia.
- Por el fortalecimiento de todas las familias, en particular, para que las familias Católicas vivan mas profundamente su llamado a ser la “iglesia doméstica”.
- Por las virtudes de la misericordia y el perdón, que estas sean demostradas por nuestros líderes y especialmente por aquellos que rezan el Padre Nuestro.
- Por el fin de una discriminación injusta, y la sanación de la división racial y toda división indigna de una nación soberana.
- Por los vulnerables entre nosotros, especialmente los niños no nacidos, los ancianos, los inmigrantes, los que no tienen empleo y los pobres.
- Por la restauración de una nación, bajo Dios, indivisible – con libertad y justicia para todos.