“En manos de grandes artistas, el cuerpo humano desnudo es pintado, esculpido o lo contrario representa verdaderamente como la expresión de la persona. Así, en las obras de Miguel Ángel nos no lleva a mirar lascivos. Con Playboy, el propósito es bastante diferente.”
—Juan Pablo, Teología del Cuerpo

La adicción a la pornografía es algo serio. Al principio, podemos pensar que ver algo pornográfico no nos hace daño -es una acción inocente que nos da un placer fugaz o pasajero; pero, como el tiempo lo demuestra, ver pornografía provoca efectos desastrosos en quien la ve, así como en las personas que tienen relación con él/ella. De pronto las mujeres, y lo que aparece en las fotos pornográficas, son vistos como objetos de deseo. Esta mentalidad se traduce generalmente en ver a las mujeres como objetos.

Las imágenes pornográficas son particularmente adictivas y nuestra sociedad moderna en América nos está bombardeando con estas imágenes en las revistas, la televisión, y el internet. La disponibilidad de las imágenes junto con su característica particular adictiva ha hecho de la industria pornográfica la más grande en el país. Se reporta que casi la mitad de los sitios en el internet se dedican a la pornografía.

Para poder cambiar la mentalidad prevaleciente en nuestra sociedad de que la pornografía es aceptable, debemos empezar con nosotros mismos y con los que nos rodean. Cuando cambiamos nuestro comportamiento, afectamos también a los que nos rodean. Cuando muchos hayan hecho lo mismo, comenzaremos a ver un cambio en el comportamiento de la sociedad sobre estas situaciones.

Si tienes adicción a la pornografía, te urgimos a que busques ayuda. Los recursos que te proveemos aquí son un buen comienzo—pero son solo un comienzo—en el proceso de sanación de este comportamiento.

Si necesita ayuda, consulte el siguiente enlace: http://www.catolicosregresen.org/answers-pornography.php

Janet Smith ofrece diversos artículos de ayuda para combatir la pornografía, he aquí uno de tantos: peligros de la pornografía

Las estadísticas son alarmantes:

  • De acuerdo a la revista “Christianity Today (12/01), el 37% de los pastores que participaron en la encuesta admitieron que tienen problemas con la pornografía.
  • De acuerdo con “Focus on the Family” (boletín familiar para pastores) de marzo 2000, el 63% de los hombres que asistieron al seminario ‘Hombre, Romance e Integridad’, admitieron tener serios problemas con la pornografía durante el pasado año.
  • De acuerdo al “New York Times” (octubre, 2000), la industria de la pornografía es más grande que la NFL, NBA, Juego de Pelota de las Grandes Ligas, y la industria del cine en Hollywood, más que todos ellos combinados y sobrepasa a todos a saltos agigantados.

Los hombres que sufren de este azote deben saber que no están solos. (Nota: Para mantener la simpleza este artículo tratará de la adicción a la pornografía entre los hombres. Las mujeres ciertamente, también pueden aplicar estos principios.)

También podemos romper el silencio acerca del hecho de que el grado de depravación en la pornografía moderna se está acelerando rápidamente. El contenido actual se asemeja solo un poco a la pornografía de la pasada generación, en que las actividades descritas eran típicamente no muy diferentes del sexo normal entre esposo y esposa. El contenido de la pornografía moderna está enfocado más y más en la absoluta aniquilación física y sicológica de la mujer. Este es un raro reconocimiento ya que hay un estigma asociado con el haber visto el material, el cual le provee este conocimiento.

En el año 2000 las revistas en las tiendas de servicio donde compramos la gasolina no describían la penetración. Ahora se ven en las carteleras anuncios de tiendas pornográficas con pornografía fuerte desplegados a lo largo de las carreteras principales.

La pornografía de la revista “Playboy” ha avanzado hasta llegar a la hora pico de nuestros televisores. Abercrombie y Fitch les están vendiendo a los adolescentes catálogos pornográficos en los mayores centros comerciales de América. Los clasificados como XXX asaltan catastróficamente los cuerpos y espíritus de las mujeres, que pasan por eróticas hoy en día, y están emigrando en este momento de las tiendas pornográficas a las tiendas de conveniencia. No es agradable ser el portador de estas noticias a aquellos que han sido bendecidos evitando esta plaga. Pero es importante saber que cuando hablamos de pornografía hoy en día, no estamos hablando de algo bonito. Una de las razones del por qué las compañías pornográficas se están saliendo con la suya es porque prácticamente nadie admite lo que ellos están haciendo hoy en día.

Si queremos derrotar a nuestro enemigo, debemos conocerlo primero y ver qué es lo que trama. Nuestro enemigo es uno que odia la vida y por lo tanto, particularmente odia los frutos de la vida; él quiere erradicar todo lo que demuestra vida en la sexualidad de la mujer. Esto explica el por qué la pornografía se está moviendo tan rápidamente.