Procedimiento para denunciar sospecha de un presunto abuso a un menor de edad.

  • Haga la denuncia inmediatamente por teléfono o en persona a la policía y al departamento de la seguridad de niños (DCS por sus siglas en inglés). En caso de que no sea emergencia, la denuncia se puede hacer en la red visitando https://dcs.az.gov/report-child-abuse
  • Si el acusado es un miembro del clero, un hombre o mujer consagrada, un empleado o voluntario de la Iglesia, después de comunicarle la denuncia a la policía y a DCS, contacte inmediatamente a La oficina de la protección de niños y jóvenes (602) 354-2396

Cuando un menor de edad divulga un abuso sexual:

  • Escuche atentamente al menor de edad.
  • Mantenga la calma, y ponga al menor de edad en un sitio seguro.
  • Deje las preguntas del niño para el entrevistador entrenado.
  • Reconforte al niño: el abuso no fue su culpa e hizo lo correcto en denunciarlo.
  • Cuando el menor de edad esté en un lugar seguro y con un adulto de confianza, inmediatamente denuncie los hechos por teléfono o en persona al cumplimento de la ley y al departamento de la seguridad de niños (DCS). Reportes que no sean de emergencia se pueden hacer en la red visitando https://dcs.az.gov/report-child-abuse
  • Si el acusado es un miembro del clero, un hombre o mujer consagrada, un empleado o voluntario de la Iglesia, después de comunicarle la denuncia a la policía y a DCS, contacte inmediatamente a La oficina de la protección de niños y jóvenes (602) 354-2396.

Un adulto denunciando un abuso pasado:

  • Un adulto quien alega haber sido abusado de niño por un miembro del clero, un hombre o mujer consagrado, o por un empleado o voluntario de la Iglesia, debe comunicarse con la oficina de La protección de niños y jóvenes (OCYP por sus siglas en ingles) para hacer una denuncia. La ley de denuncias de Arizona (ARS 13-3620) no es aplicable. El individuo tiene el derecho de hacer una denuncia ante la policía. Si el abuso denunciado ocurrió en otra diócesis, la oficina de La protección de niños y jóvenes puede contactar la oficina de La protección de niños y jóvenes de esa diócesis y pedir ayuda para ese individuo. Se recomienda denunciar el hecho a las autoridades en la ciudad/estado donde ocurrió el abuso.

La diócesis se compromete a trabajar con buena fe en la aplicación de la ley y el Departamento de la seguridad de niños. Para no comprometer una investigación, aquellos que realicen el informe no hablarán del hecho con nadie a menos que sea necesario por motivos de la investigación.